Marset lavaba dinero del narco con “ventas simuladas” de inmuebles, según viceministro Aguilera
Por este caso se han realizado más de 30 operativos, se investiga a más de 16 personas y se ha afectado en más de 8 millones de dólares a Marset, según la Policía y Fiscalía
El viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, informó que el uruguayo Sebastián Enrique Marset Cabrera lavaba su dinero proveniente del narcotráfico con “venta simulada” de inmuebles y vehículos lujosos.
“El lavado de dinero se lo ha hecho a través de operaciones de comercios ficticias y como hemos visto compras y ventas simuladas, todas las propiedades descritas por el comandante Policía Boliviana, permiten establecer que la principal fuente de lavado de activos era relacionada a bienes raíces, a negocios de lujos, artes de joyas”, precisó la autoridad.
Aguilera dijo que Marset encargó a su testaferro Hernán G. L. la legitimación de sus fondos financieros y este se encargó de crear cuentas bancarias y de adquirir inmuebles a nombres de “palos blancos”, que eran personas de su confianza.
“A partir de las actividades de la Policia, se ha conocido que Hernán G. L. salió del país el 24 de julio a través de la frontera de Puerto Suárez (con Brasil) y no se encuentra en el país, pero se allanaron sus viviendas y quedaron precintadas y vamos a demostrar que él estaba vinculador a Marset con la intensión de gestionar la transparencia de sus activos”, informó el viceministro.
Fue en uno de estos allanamientos, precisamente en un departamento del piso 2 del Condominio Zero, donde se encontró 420 mil dólares en el interior de una bolsa negra que estaba escondida en un ropero. “Este condominio se usaba como guarida para guardar dinero en efectivo”, precisó Aguilera.
Asimismo, dijo que se han secuestrado 35 vehículos de Marset, que estaban a nombre de “palos blancos”. Agregó que se pedirá informes sobre las compras de estos motorizados y de los 12 inmuebles que esta jornada fueron precintados.
Actualmente Marset es el hombre más buscado en Bolivia y son más de 2.800 efectivos los que realizan controles permanentes en todo el país, con la finalidad de encontrar pistas de su paradero. Se cree que aún permanece en Bolivia con su esposa e hijos.