Muere mujer tras contraer rabia rescatando animales en Cochabamba

Una mujer de 27 años perdió la vida por rabia humana en una clínica privada de la ciudad de Cochabamba. Según las investigaciones del Servicio Departamental de Salud (Sedes), la víctima era rescatista de animales y contrajo la enfermedad realizando esta labor durante el mes de enero.

La responsable del Programa de Rabia del Sedes de Cochabamba, Ingrid Álvarez, informó que la paciente llegó el 12 de abril al centro de salud privado, luego de presentar sintomatología característica de rabia, por lo que fue internada y luego intubada.

“Cuando la mujer fue atendida por el personal de salud ya tenía miedo al aire, al agua y a la luz. Después tuvo un deterioro en su estado de conciencia y su cuadro clínico se complicó, hasta que perdió la vida”, detalló la autoridad de Salud en contacto telefónico con EL DEBER.

Álvarez dijo que la muerte de la paciente pudo haberse evitado, si se colocaba las vacunas contra la rabia, pero lamentablemente no acudió a un centro médico oportunamente, pues lo hizo cuando la enfermedad ya estaba avanzada.

“La rabia tiene un periodo de incubación de tres meses, ella (la infortunada) contrajo la enfermedad en enero cuando rescataba perros y gatos de la calle, pero no visitó a un médico. La población debe tener en claro que la rabia es mortal y se contrae hasta con un simple rasguño o lamedura, por lo que se recomienda que visiten un centro”, comentó la autoridad.

Asimismo, la responsable del Programa de Rabia pidió a la población cochabambina vacunar a sus mascotas, porque esta es la forma más efectiva de evitar la rabia humana.

Por su parte, el director de Epidemiología del Sedes de Cochabamba, Rubén Castillo, comentó que la paciente sufrió una lesión en una de sus manos y “a partir de la cual comenzó la enfermedad”, que desencadenó su muerte.

Además, Castillo informó que, con este caso, suman tres los decesos registrados en este año a causa de rabia humana en el departamento cochabambino. Los primeros dos se registraron en la zona rural, uno en el municipio de Arbieto y el otro en Pojo.

Fuente: EL DEBER