Jade, la reina de la belleza que es hija de un jefe narco y fue detenida con 359 kg de cocaína en Entre Ríos

Jade Isabela Callaú Barriga tiene 21 años.

Jade Isabela Callaú Barriga es una experta simuladora. Cuando aterrizó de emergencia en una avioneta en el medio del delta, en Ibicuy, avioneta narco entre rios.jpg , que piloteaba un brasileño, le dijo al dueño del campo que estaba embarazada y que debía ser atendida en un hospital. Su objetivo era evitar que revisaran la avioneta donde transportaba 359 kilos de cocaína. Después se detectó que no estaba embarazada.

Pero además en Bolivia trascendieron detalles de la vida de esta narcotraficante. Jade era reina de belleza de San Borja, un municipio de Beni, en el amazonas boliviano. Callaú tiene 21 años y fue reina de belleza de la FexpoBorja en Bolivia, hace 6 años. Ahora se vincula a esta joven como la hija de un jefe de un cartel de narcotráfico. “Una mujer con una estatura aceptable, estampa y porte de reina, belleza muy marcada y con una linda sonrisa”, la definieron desde la organización, según citaron los medios locales.

Fuentes del Ministerio de Seguridad de Entre Ríos señalaron a AIRE que Callaú sería hija de un narco muy importante de Bolivia, que tiene contactos con gente de la región. Por ese motivo se dispuso un refuerzo de la custodia de la comisaría de Ibicuy ante la posibilidad de un rescate.

De la misma zona que Jade es Alondra Mercado Campos, la exmiss Mundo Bolivia que fue detenida el 28 de diciembre de 2024 por tráfico de armas. A fines de noviembre pasado, la policía boliviana encontró artillería y municiones en la casa donde vivía con su novio. Dada esta situación, muchos se empezaron a preguntar quién es, cómo fue su camino sobre los escenarios y a que se dedica actualmente esta mujer.

Reina de bella e hija de un jefe narco

La joven tiene de 22 años y estudió la licenciatura en Psicología en la Universidad Autónoma del Beni. En lo que respecta a su familia, es la mayor de las cuatro hijas de Cristian Mercado y Shirley Campos, sus padres. El glamour muchas veces se asocia a estas historias atravesadas por el narcotráfico y el dinero. Lo que se investiga en Argentina es que Callaú traía cocaína para que fuera parte de un cargamento rumbo al exterior. En la zona de Cochabamba, Santa Cruz de la Sierra y Beni, en Bolivia, se produce la pasta base y luego la cocaína, y después se envía al Chaco paraguayo, una región poco habitada e inhóspita en Paraguay, donde se consolidan los cargamentos que aterrizan en pistas clandestinas, según el investigador de la Universidad de Asunción Carlos Pires. Luego, a través de la hidrovía o por avionetas las cargas de cocaína llegan a Argentina, fundamentalmente Rosario y Buenos Aires, y Uruguay, donde se camuflan para salir rumbo a Europa o Asia, donde el valor de la droga es más de diez veces mayor.

Lo que observan desde hace tiempo los investigadores de PROCUNAR es que los vuelos se realizan en el límite entre Argentina y Uruguay, sobrevolando las inmediaciones del río que marca la frontera entre ambos países. La sospecha es que en esa zona es más difícil una intervención aérea cuando las aeronaves narcos vuelan por momentos en cielo argentino y otros en uruguayo.

En el Ministerio de Seguridad de la Nación analizaron que la avioneta Cessna 210 que aterrizó de emergencia en Ibicuy, el delta entrerriano, con 359 kilos de cocaína, hizo esa ruta que incluye a estos tres países. Desde la zona de Beni, en Bolivia, hasta el punto donde aterrizó de manera inesperada, la aeronave hay más de 1600 kilómetros, y ese tipo de avión tiene una autonomía de 1700. Néstor Roncaglia, ministro de Seguridad de Entre Ríos, y exjefe de la Policía Federal, señaló en diálogo con Aire de Santa Fe que la trayectoria de vuelo de la avioneta da indicios que se dirigía hacia la provincia de Buenos Aires. Allí está muy cerca el puerto de Zárate Campana.

El análisis que hacen los investigadores de la Procuraduría de Narcocriminalidad es que uno de los que tiene influencia desde hace por lo menos tres años en esa ruta es el boliviano Jorge Adalid Granier, quien se encuentra detenido actualmente en el penal de Ezeiza, con uno de sus socios argentinos, el rosarino Fabián Pelozzo. Granier tiene investigaciones abiertas también en Paraguay, donde operaba su hermano y sus hijos.

Este tipo de investigaciones que incluye el trabajo coordinado con otros países siempre enfrenta serias dificultades. La justicia boliviana es indiferente a todos los pedidos que se hacen desde Argentina. Jamás avalaron, por ejemplo, una extradición de un narco de ese país a la Argentina. Con ¡Paraguay hay mejor vínculo, pero muchas sospechas de la penetración del narcotráfico a nivel institucional.

Los vuelos narcos provenientes de Bolivia y de Paraguay llegan cada vez más cerca del centro del país. Eso es algo que antes no ocurría. Los llamados “bombardeos” de droga era el método más usado en el norte de la Argentina, a pocos kilómetros de la frontera con Bolivia, cuando no había intermediación de Paraguay.

Salta y Santiago del Estero eran las provincias donde más se daba esta metodología, que consiste en que la avioneta pierde altura para arrojar los bultos con la droga en puntos fijados con GPS. En las inmediaciones, generalmente hay cómplices que en pocos minutos se llevan el cargamento.

Ahora las avionetas hacen recorridos más largos. Por ese motivo, según remarcó a AIRE el secretario de Lucha Contra el Narcotrafico y la Criminalidad Organizada, Martín Verrier, se incorporaron más radares para tener un mejor control aéreo, como el que se puso en funcionamiento el año pasado en Tostado, norte de la provincia de Santa Fe.

A fines de octubre pasado, una avioneta Cessna 206 aterrizó cerca de Pueblo Andino, a unos 35 kilómetros de Rosario. Según la ministra Patricia Bullrich, los radares habían detectado ese vuelo ilegal y la aeronave fue obligada a descender por dos cazas de la Fuerza Aérea.

El piloto Oscar Armando Caba Hurtado, que era comandante de la Fuerza Aérea boliviana, logró huir hasta que fue detenido cuando intentaba cruzar el río Carcarañá. En la Cessna 206 llevaba 475 kilos de cocaína. La sospecha es que esa droga pertenecía a Granier y Pelozzo, que montaron en Ibarlucea una especie de hub narco para la exportación. Este grupo se dedica a la logística, una tarea dentro del negocio del contrabando internacional de droga que es una de los mejores pagos.

Granier tiene estrechos contactos con el grupo criminal brasileño Primeiro Comando Capital. Granier fue detenido a finales de marzo de 2023 en un control de tránsito en la pequeña localidad de Jaraguari, en el estado de Mato Grosso do Sul. Se movía con identidad falsa. Un mes antes fue procesado por el juez federal de Salta Julio Leonardo Bavio, quien lo acusó de ser “responsable del delito de organizador de transporte de estupefacientes agravado por el número de personas intervinientes”, por un cargamento de 389 kilos de cocaína interceptados en septiembre de 2020.

Este hombre alojó en su departamento en el barrio de Recoleta, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, ubicado en Rodríguez Peña 1057, a uno de los líderes más poderosos de la organización brasileña Gilberto Aparecido Dos Santos, alias Fuminho, que fue detenido por la DEA y la Policía Federal de Brasil en Mozambique al inicio de la pandemia.