Productores del cacao silvestre claman por atención humanitaria ante pérdidas por lluvias

Los productores del cacao silvestre, reconocido  por su calidad de excelencia, al ser la única especie endémica en el mundo, y que se produce  en las regiones de  Alto Beni del departamento de La Paz  y de Beni, han perdido gran parte de su producción, están incomunicados por el mal estado de los caminos  y piden la inmediata  declaratoria de desastre, para recibir ayuda humanitaria y evitar así mayores pérdidas.

En un contexto internacional, en el que  el cacao se disparó en precio como nunca antes, debido a la reducción de producción de este “alimento de los Dioses”  en el mundo,  Bolivia,  promociona su potencial en la producción de cacao. El quintal de este apetecido producto llegó a costar el 2023 entre 1.600 y 1.800 bolivianos, este año se elevó hasta los 4.000 bolivianos por quintal.

Tras bambalinas de evento del Salón de Cacao,  productores del mejor cacao sufren la pérdida de sus cacaotales.

Tras bambalinas de evento del Salón de Cacao,  productores del mejor cacao sufren la pérdida de sus cacaotales.Tras bambalinas de evento del Salón de Cacao,  productores del mejor cacao sufren la pérdida de sus cacaotales.

El cacao boliviano, reconocido entre los 50 mejores del mundo en la Selección Cocoa Award 2019, y que el 2023 se hizo merecedor a medalla de plata en el concurso Cacao off Excelence, según el INE, destina una superficie estimada de 4.884 hectáreas, para el cultivo del cacao híbrido, que es una especie introducida mejorada y el cacao silvestre, caracterizado por su  mayor intensidad de aroma y sabor, cuya producción es natural y no cultivado, porque es una especie endémica.

Paradójicamente  y mientras  que la semana pasada  el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, junto a la Cancillería y COPRACAO (Confederación de Productores y Recolectores Agroecológicos de Cacao), inauguraron el  evento denominado Salón del Cacao, para resaltar las potencialidades y calidad del cacao boliviano en el mercado internacional,  los productores  de cacao silvestre, reconocido por su calidad de excelencia, sufren el embate de una temporada de lluvias que les ocasionó pérdidas, dimensionadas como cuantiosas para su frágil  economía.

De esta manera la oportunidad de beneficios económicos que ofrece el mercado internacional actualmente, se convierte en una ilusión, al estar aislados, sin opción de sacar su producto y sin recibir  la atención que requieren para atender los daños que sufren por las inundaciones