Terremotos en Turquía y Siria: el balance a un mes de la catástrofe
Hace un mes, dos fuertes terremotos sacudieron partes de Turquía y Siria. En Turquía, el desastre natural está teniendo, además, enormes repercusiones políticas y sociales.
Las cifras son escalofriantes: al menos 50.000 muertos, 214.000 edificios derrumbados o en peligro de derrumbarse y, solo en Turquía, once ciudades grandes quedaron destruidas casi por completo. Además, millones de personas han perdido sus hogares y necesitan ayuda urgente. Un mes después de los devastadores terremotos en Turquía y Siria, aún se desconoce el alcance total de los daños.
La responsabilidad del estado
Inmediatamente después de los terremotos, el dolor de los sobrevivientes se mezcló con ira. ¿Cómo pudieron colapsar tantos edificios supuestamente a prueba de terremotos? La negligencia del Estado turco habría sido responsable de que el terremoto haya tenido consecuencias tan graves. En muchos casos, no se habrían seguido las normas de construcción, lo que agravó el desastre.
Hasta el momento, las autoridades turcas han puesto bajo sospecha a un total de 957 personas, a las que se considera en parte responsables del elevado número de víctimas y de los cuantiosos daños. 236 sospechosos han sido arrestados, otros 330 han sido puestos bajo "control judicial" y cuatro continúan en prisión preventiva. Se han emitido órdenes de arresto para 270 de los sospechosos, 5 están en el extranjero, 82 han sido puestos en libertad, y 32 han muerto.
Además, existen informes de la autoridad turca de gestión de catástrofes, la AFAD, que alertaron hace años de las graves consecuencias de un posible terremoto y recomendaron medidas para evitarlas. Dichos planes fueron elaborados y publicados entre 2019 y 2021.
Niños desamparados
Uno de los mayores temas de discusión es la situación y el futuro de los niños afectados. Según Unicef, el terremoto habría afectado a unos cinco millones de niños de Turquía y Siria.
El ministerio turco de Familia y Servicios Sociales informó que hasta el 1 de marzo, un total de 1.911 niños sin tutores legales vivos han sido rescatados de las ruinas y registrados. Después de una verificación de identidad, 1.543 niños ya habrían sido entregados a algún familiar. Por otro lado, 95 niños están actualmente bajo la protección del ministerio y la identidad de 81 niños aún no ha sido aclarada.
Pero también ha habido acusaciones públicas de que algunos niños habrían sido entregados a comunidades y asociaciones islamistas y progubernamentales.
Elecciones a la vuelta de la esquina
Mientras se responsabiliza en parte al Gobierno de las devastadoras secuelas de los terremotos, Turquía se encamina hacia la celebración de elecciones presidenciales y parlamentarias. La catástrofe también llevó a los políticos a interrumpir brevemente la campaña electoral.
Sin embargo, esta parece haberse reanudado: el 1 de marzo, el presidente Recep Tayyip Erdogan criticó a la oposición en un discurso y dijo que, después de todo, las elecciones deberían adelantarse y celebrarse el 14 de mayo. Ahora se espera que, el 10 de marzo, emita un decreto oficializando la nueva fecha.
La cara reconstrucción
La gigantesca tarea de reconstrucción que se avecina llega en un momento en que Turquía ya sufre una crisis económica. Según cálculos del Banco Mundial, los terremotos causaron daños materiales por un valor de 34.200 millones de dólares estadounidenses. Los expertos estiman que el desastre aumentará la demanda de muchos productos y servicios, lo que a su vez impulsará en un 50 por ciento la ya alta inflación.
En el norte de Siria, los terremotos golpearon una región que ya se había desangrado por la guerra civil. Ahora, muchas personas allí se han quedado sin hogar. Según los medios locales, alrededor de 8,8 millones de personas se han visto afectadas por los sismos. Se han informado de 5.900 muertes, pero es probable que el número real sea significativamente mayor. El país está recibiendo ahora ayuda, pero mucha no llega a su destino porque gran parte de la zona afectada es controlada por milicias islamistas.
Fuente: DW