Plantas industrializadoras de alimentos estarán listas en 2024
INDUSTRIALIZACIÓN. El Gobierno nacional informó que en el 2024, serán puestas en funcionamiento el 80% de las plantas industrializadoras de alimentos, que están en construcción a cargo de empresas estatales con millonarias inversiones.
En 2024, serán puestas en funcionamiento el 80% de las plantas industrializadoras de alimentos, que están en construcción a cargo de empresas estatales con millonarias inversiones.
En el marco de la política de sustitución de importaciones que encara el Gobierno nacional, en Bolivia se levantarán hasta el 2025, año del Bicentenario, 130 plantas industriales con una inversión de $us 3.600 millones.
“Al año van a ser la mayoría de las plantas que van a ser implementadas, el 80 por ciento de las plantas van a ser implementadas 2024 y las más grandes vamos a dejar para 2025”, informó el viceministro de Políticas de Industrialización, Luis Siles, en contacto con Bolivia Tv.
Según la autoridad, el restante 20% de las plantas que serían las de química básica, serán puestas en funcionamiento en 2025 debido a que su emplazamiento “requiere más tiempo ya que contarán con tecnología europea y serán de características grandes a escala Latinoamérica”.
Del total de las plantas industriales en construcción, al menos 50 son del rubro de la manufactura y de alimentos a cargo de empresas públicas dependientes del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural (MDPyEP).
Hasta finales de este año, el Gobierno tiene previsto inaugurar cuatro plantas industrializadoras de papa, trigo, maíz y hoja de coca, en los departamentos de La Paz, El Alto, Cochabamba y Santa Cruz.
“Son cuatro plantas super importantes que van a estar concluidas esta gestión 2023, porque es necesario que demos soberanía alimentaria a los bolivianos”, destacó el viceministro de Políticas de Industrialización. Anunció que las plantas que serán inauguradas son: la de almacenamiento y transformación de trigo, en el municipio paceño de Viacha; y la de acopio, almacenamiento y transformación de papa, en El Alto.
Fuente: EL MUNDO