La madre biológica de Simone Biles implora por el perdón: "Solo pido que podamos seguir adelante"
Shanon Biles busca reconciliarse tras años de ausencia, mientras su hija celebra un exitoso regreso a la competición
En los Juegos Olímpicos de París 2024, la gimnasta estadounidense Simone Biles (27 años), demostró una vez más por qué es considerada una de las mejores atletas de todos los tiempos. Tres años después de una crisis mental que la obligó a retirarse parcialmente de los Juegos de Tokio 2020, regresó a la cima del mundo deportivo, llevándose tres medallas de oro en las competiciones generales, individuales y de salto, así como una medalla de plata en suelo. Con un total de once medallas olímpicas en su carrera, su historia de éxito ha sido un ejemplo de resiliencia, pero también es un reflejo de su dura infancia, marcada por el abandono de su madre biológica, Shanon Biles (52 años), cuando ella tenía tan solo seis años.
La relación entre Simone y su madre biológica ha sido inexistente desde que Shanon se vio obligada a renunciar a la custodia de Simone y sus tres hermanos debido a su lucha contra la adicción a las drogas y el alcohol. Desde entonces, Simone y su hermana menor, Adria (25 años), fueron adoptadas por sus abuelos maternos, Nellie y Ronald Biles, mientras que sus dos hermanos mayores, Ashley y Tevin, fueron acogidos por una tía. Esta separación fue el punto de inflexión en la vida de Simone, y ella misma ha reconocido que estas experiencias la prepararon para enfrentar los desafíos que la llevaron al éxito.
En una reciente entrevista con el Daily Mail, Shanon expresó su deseo de reconciliarse con su hija, afirmando que vive con la esperanza de que algún día Simone le conceda el perdón. «Le pediría que me perdone y le preguntaría si podemos seguir adelante, que no me juzgue por mi pasado», declaró Shanon, quien ahora se define como una «adicta en recuperación». Aunque tiene el número de teléfono privado de Simone, ha decidido no contactar directamente con ella, prefiriendo respetar su espacio y esperar pacientemente a que su hija decida dar el primer paso.
Shanon ha vivido una vida llena de dificultades, incluso después de superar sus adicciones. Continúa residiendo en Columbus, Ohio, en la misma casa donde Simone pasó sus primeros años, y enfrenta graves problemas económicos que la llevaron a declararse insolvente en 2018. A pesar de estos obstáculos, Shanon asegura que ha cambiado y que está comprometida con su recuperación y con la idea de algún día restablecer el vínculo con su hija.
Por su parte, Simone ha hablado abiertamente sobre cómo su infancia difícil, incluyendo la separación de su madre biológica y su tiempo en el sistema de acogida, la preparó para su vida como atleta de élite. «No estaría donde estoy sin ese punto de inflexión. Vivir separada de mi madre biológica, estar en un hogar de acogida y ser adoptada por mis abuelos me ha preparado para un mejor camino», reflexionó la gimnasta en una declaración.
A medida que Simone Biles sigue acumulando éxitos y consolidando su legado en la historia del deporte, la historia de su madre biológica, Shanon, añade una dimensión humana a su trayectoria, recordándonos que detrás de cada estrella hay una historia personal llena de desafíos y superación. La reconciliación entre madre e hija, sin embargo, sigue siendo una incógnita que solo el tiempo podrá resolver. Mientras tanto, Shanon espera pacientemente, con la esperanza de que algún día, Simone le dé la oportunidad de pedirle perdón en persona y sanar las heridas del pasado.
FUENTE: ABC