Jorge Richter: "Si se deja las subvenciones en energías y alimentos, esos costos, se trasladarían a la población"

Según el vocero presidencial se tiene una inflación controlada garantizada al igual que el esquema de subvenciones en el país

La Organización de Naciones Unidas (ONU) advirtió de una crisis alimentaria en el mundo que podría durar varios años y que es agravada por la guerra en Ucrania, que se suma a los efectos adversos dejados por la pandemia.

Ante ello, el vocero presidencial del Gobierno de Bolivia, Jorge Richter, señaló que cuando se produce una situación como la antes descrita, lo que se debe hacer, "para observar la realidad", es si el impacto sobre nuestra economía es evidente y ver cómo se están abasteciendo los mercados de los diferentes productos y el estado de la producción en el país y, en esa perspectiva, “existe una recuperación del precio que avanza hacia la normalidad de aquellos productos que se han incrementado”.

Según Richter, en Bolivia “no tenemos amenaza inflacionaria”, y destacó que “nuestro modelo económico social productivo comunitario del país” tiene un conjunto de elementos, como subsidios, en lo que el Estado asume los costos mayores para que esto no se traslade a la población, además que este esquema permite que el poder adquisitivo de los salarios se mantenga.

“Hay un conjunto de elementos en el modelo económico que permiten que la inflación esté contenida porque se asumen estos subsidios, estamos hablando de energía y alimentos”, resaltó.



Subvenciones

El vocero indicó que el esquema de subvenciones no es un inconveniente" y que es parte del modelo porque tiene un "concepto social que está arraigado en él y se estructura como un componente filosófico, "esto quiere decir, que si se deja las subvenciones en energías y alimentos, esos costos, que ahora paga el Estado, se traslada a la población". 

“Lo que algunos llaman ese sinceramiento de la economía, en realidad es cargar sobre el boliviano un costo que puede aumentar los efectos inflacionarios sobre nuestra economía y, segundo, reduciría las capacidades de adquisición que tiene el salario del boliviano”, indicó.

Según Richter, el esquema de subvenciones es una forma de distribución del ingreso de los esfuerzos económicos del país y que no sea el ciudadano que tenga que cargar con las dificultades de lo que puede significar una elevación permanente, por ejemplo, del combustible.

"La inflación controlada está garantizada y también el esquema de subvenciones en el país y se trabaja de manera que pueda sustituirse estas subvenciones con producción propia", acotó.

Fuente: UNITEL