Fedjuve alerta encarecimiento de la carne y acusa al contrabando y falta de control en fronteras

Imagen Referencial

Tarija enfrenta una creciente crisis en el costo de productos esenciales, y la carne es uno de los más afectados. Celestino Barro, presidente de la Federación Departamental de Juntas Vecinales (Fedjuve), denunció que los intermediarios encarecen el kilo gancho de carne al punto que muchos carniceros se han visto obligados a cerrar sus negocios.

En entrevista con el programa Antes de Media Noche de Televisión Andalucía, Barro explicó que los comercializadores que viajan a Santa Cruz acuerdan la compra de carne a 32 bolivianos el kilo gancho. Sin embargo, otros intermediarios, con transporte propio, la revenden en Tarija a precios que oscilan entre 37 y 38 bolivianos, elevando significativamente el precio al consumidor final.

“Hay una especulación evidente. El gobierno debería fijar un precio uniforme para evitar estos abusos”, afirmó. También cuestionó la falta de control del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), señalando que no cuentan con datos actualizados sobre la demanda de carne en regiones como Bermejo.

Barro alertó que esta desorganización permite que parte de la carne que llega a Tarija termine saliendo del país por contrabando hacia Argentina. Aseguró que actualmente se consume más carne criolla debido a los precios, y que ya no se encuentra carne en Santa Cruz porque los intermediarios compran toda la oferta disponible.

La Fedjuve ha solicitado incluso el cambio del comandante de la Naval en Bermejo para reforzar el control fronterizo, ante la salida masiva e ilegal de productos de la canasta familiar. “Ni un solo camión ha sido decomisado por Senasag hasta ahora, pese a las evidencias de tráfico de carne”, criticó.

Sobre otros productos, Barro indicó que la harina legal, con póliza, es más barata que la de contrabando, y comparó precios como el del aceite, que en Cochabamba se vende a 14 bolivianos, mientras en Tarija es mucho más caro.

Para el dirigente, Tarija se ha convertido en una ciudad de tránsito, donde los productos bolivianos son llevados hacia la frontera para su reventa en Argentina, encareciendo los precios en el mercado local. Entre los productos más afectados mencionó la carne, el pollo, el huevo y el aceite.

Finalmente, anunció que la Fedjuve convocará a la Fiscalía y a la Policía Boliviana para realizar operativos conjuntos de control en los mercados. También pidió a la Intendencia Municipal fortalecer la vigilancia, exigir balanzas para verificar el peso real de los productos, y colocar pizarras con precios referenciales para evitar el agio y la especulación.