El banco suizo UBS compró a su rival Credit Suisse para salvar "la estabilidad del sistema financiero mundial"
El banco suizo UBS compró a su rival Credit Suisse para salvar "la estabilidad del sistema financiero mundial"
El mayor grupo bancario suizo, UBS, compró la otra entidad bancaria más grande del país, Credit Suisse, por 3.200 millones de dólares.
Así lo confirmó este 19 de marzo el presidente de la Confederación Helvética, Alain Berset, afirmando que es la mejor manera de "restablecer la confianza" y servirá "para la estabilidad de todo el sistema financiero mundial", afirmó.
La compra será por valor de 3.000 millones de francos suizos (3.020 millones de euros, 3.200 millones de dólares) en acciones de UBS, es decir, a un precio de solo 0,76 francos suizos por acción de Credit Suisse que el viernes aún valían 1,86 francos.
El mayor banco de Suiza, UBS comprará a su rival en dificultades Credit Suisse.
"La situación es conocida, Credit Suisse es uno de los 30 bancos sistémicos a nivel mundial. Es uno de los dos principales bancos del país. Por lo tanto, no solo es decisivo para Suiza, para nuestras empresas, para los clientes privados, para sus propios empleados, sino también para la estabilidad de todo el sistema financiero", agregó Berset.
Credit Suisse, el segundo banco más grande del país después de UBS, "fue motivo de preocupación durante varios meses", dijo, y agregó que las turbulencias en los mercados en los últimos días demostraron que "la confianza necesaria" en el banco no se podía restaurar.
"Esta turbulencia desestabilizó a los bancos más frágiles y este fue el caso de Credit Suisse. A pesar de la buena capitalización, Credit Suisse perdió la confianza de los bancos", explicó.
En consecuencia, "ante tal pérdida de confianza, asegurar el suministro de liquidez a un banco es una de las medidas a tomar como máxima prioridad". Por ello el Gobierno aprobó el jueves por la noche 50.000 millones en liquidez inmediata para Credit Suisse --lo cual ya se conocía--. Ahora Berset anunció que el total de garantías asciende a 100.000 millones francos suizos.
Ya el viernes el Gobierno llegó a la conclusión de que "ya no se podía restablecer la confianza necesaria y que era imprescindible una solución rápida que garantizara la estabilidad".
El periódico Financial Times, que fue el primero en informar el viernes sobre la posibilidad de que el banco más grande de Suiza se trague a Credit Suisse, dijo que UBS había acordado comprarlo por US$ 2.000 millones, y su compañero prestamista con sede en Zúrich rechazó una oferta anterior de US$ 1.000 millones.
El FT dijo que los accionistas recibirían 0,50 francos suizos (0,54 dólares) por acción, y que el acuerdo se cerraría el domingo antes de que abran los mercados en Asia después del descanso del fin de semana.
Las autoridades suizas sintieron que no tenían más remedio que presionar a UBS para que superara su reticencia, debido a la enorme presión ejercida por los principales socios económicos y financieros de Suiza, que temían por sus propios centros financieros, dijo el diario Blick.
Una fusión de esta escala, que implica la absorción total o parcial de un banco y que despierta la creciente inquietud de los inversores, normalmente llevaría meses.
El periódico Sonntags Zeitung lo llamó "la fusión del siglo". "Lo impensable se vuelve realidad: Credit Suisse está a punto de ser absorbido por UBS", dijo el semanario.
"La presión del extranjero se había vuelto demasiado grande, y el temor de que el tambaleante Credit Suisse pudiera desencadenar una crisis financiera mundial", agregó.
La Asociación de Empleados Bancarios Suizos dijo que había "mucho en juego" para los 17.000 empleados de Credit Suisse, "y por lo tanto también para nuestra economía". Además, decenas de miles de empleos fuera de la industria bancaria estaban potencialmente en riesgo, agregó.
Al igual que UBS, Credit Suisse es uno de los 30 bancos de todo el mundo considerados como Bancos de Importancia Sistémica Global, de tal importancia para el sistema bancario internacional que se los considera demasiado grandes para quebrar.
Pero el movimiento del mercado parecía sugerir que el banco estaba siendo percibido como un eslabón débil en la cadena.
Fuente: PERFÍL