El aumento de cultivos de hojas de coca en áreas protegidas bolivianas preocupa a la UE

Jaume Segura, jefe de la delegación de la Unión Europea en Bolivia, en la presentación del 'Informe de Monitoreo de Cultivos de Coca 2023'/EFE

La Unión Europea (UE) expresó su preocupación por el aumento del 34 % en los cultivos de hojas de coca en las áreas protegidas de Bolivia registrado en el informe de monitoreo de esas plantaciones para 2023 que presentó este martes la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc, en inglés).

El jefe de la Delegación de la UE en Bolivia, el español Jaume Segura, señaló que al bloque le preocupa "sobre todo" el incremento "del 34 % en aquellas áreas que deben tener un valor especial por su valor ecológico y cultural" en el país, reflejado en el 'Informe de Monitoreo de Cultivos de Coca 2023' de la Unodc.

"El crecimiento general en las zonas protegidas es una tendencia que requiere una atención prioritaria y colaborativa, dada su repercusión no solo en términos de sostenibilidad ambiental, sino también en el ámbito de la seguridad y el desarrollo comunitario", manifestó.

Para Segura, estos desafíos "son una llamada a intensificar" la "alianza estratégica" de la UE con Bolivia "reforzando las acciones que se han demostrado efectivas y buscando innovar aquellas que se necesiten reformular".

"Creemos firmemente que con una acción concertada y con el involucramiento de todos los actores podemos no solo revertir algunas de las tendencias preocupantes, sino también fortalecer las oportunidades de desarrollo alternativo que beneficien a las comunidades locales y protejan nuestro rico patrimonio ambiental", añadió.

El embajador destacó que la UE cumple 30 años en Bolivia y que desde 2005 el bloque invirtió "más de 225 millones de euros en programas" de manejo sostenible de los cultivos de hojas de coca, la lucha contra el crimen organizado y el apoyo a la política nacional antidrogas.

Mencionó que en la actualidad el país andino se beneficia de programas por un valor de 60 millones de euros a través de 22 proyectos con financiación europea.

El informe presentado en esta jornada señala que los cultivos de hoja de coca en Bolivia registraron un incremento del 4 % al pasar de 29.900 hectáreas en 2022 a 31.000 hectáreas en 2023.

La representante de la Unodc en Bolivia, la colombiana Mónica Mendoza, indicó que también se identificó que hay cultivos de coca en seis de las 23 áreas protegidas del país, que son los parques nacionales Isiboro Sécure, Carrasco, Cotapata, Amboró, Apolobamba y Madidi, este último una de las áreas más biodiversas del mundo.

Mendoza sostuvo que en 2024 las autoridades bolivianas "concentraron buena parte de sus esfuerzos en la erradicación" de la planta en estas zonas y que el impacto de esas acciones se reflejará en el informe de monitoreo correspondiente al año pasado que se presentará en esta gestión.

El ministro boliviano de Gobierno (Interior), Eduardo del Castillo, sostuvo que en 2024 fueron declarados libres de cultivos las áreas protegidas Amboró y El Choré, y que la meta este año es hacer lo propio en el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis) y el parque Carrasco, ambos en el centro del país.

Del Castillo valoró el trabajo conjunto con la UE la Unodc y también con los cocaleros para que no vuelvan a cultivar la planta en zonas no permitidas.

La hoja de coca en Bolivia está consagrada en la Constitución vigente desde 2009 por sus usos tradicionales, medicinales y culturales, pero una parte de la producción es desviada al narcotráfico para la fabricación de cocaína.