EE.UU. entra en guerra con Irán tras bombardeos a instalaciones nucleares clave

En una escalada significativa del conflicto en Medio Oriente, el presidente Donald Trump anunció el sábado por la noche que Estados Unidos había lanzado ataques aéreos contra tres instalaciones nucleares en Irán, incluyendo el complejo subterráneo de Fordo, uno de los centros de enriquecimiento de uranio más protegidos del país.

“Todos los aviones ya están fuera del espacio aéreo iraní”, escribió Trump en una publicación en redes sociales, asegurando que habían arrojado una “carga completa” de explosivos sobre Fordo. “Todos los aviones están regresando a salvo”.

Posteo de Donald Trump sobre bombardeo a Irán

Además de Fordo, los bombardeos alcanzaron Natanz -otro centro clave de enriquecimiento que había sido previamente atacado por Israel con armamento de menor escala- y un sitio cercano a la ciudad histórica de Isfahán, donde se cree que Irán almacena uranio enriquecido a niveles cercanos al grado armamentístico.

Los ataques del sábado marcan una implicación directa de Estados Unidos en la guerra entre Israel e Irán, después de varios días de incertidumbre sobre si Trump intervendría. El presidente, que durante años prometió mantener a Estados Unidos alejado de las llamadas “guerras eternas” en el extranjero, dio un giro notable al ordenar bombardeos a gran escala contra instalaciones nucleares iraníes.

El ingreso de Washington en el conflicto se produce en medio de una ola de intercambio de fuego: Israel lanzó bombardeos sobre instalaciones de misiles, depósitos de municiones y otro sitio nuclear en territorio iraní, mientras que Irán respondió con misiles balísticos y drones dirigidos a territorio israelí.

Además, el ejército israelí informó que había eliminado a tres altos mandos de la Guardia Revolucionaria Islámica: Mohammed Said Izadi, Behnam Shahriyari y Aminpour Joudaki. Según el Ministerio de Defensa israelí, Izadi y Shahriyari eran figuras clave dentro de la Fuerza Quds, unidad responsable de coordinar las milicias aliadas de Irán en la región. Hasta el momento, Teherán no ha confirmado oficialmente esas muertes.

El presidente iraní Masoud Pezeshkian afirmó que su país no detendría su programa nuclear

Aunque Irán insiste en que su programa nuclear tiene fines civiles, Israel considera la posibilidad de que Teherán desarrolle un arma nuclear como una amenaza existencial. “Los ataques han retrasado entre dos y tres años la capacidad de Irán para fabricar una bomba nuclear”, aseguró el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Gideon Saar.

Por su parte, el presidente iraní Masoud Pezeshkian afirmó que su país no detendría su programa nuclear. “No reduciremos nuestras actividades nucleares a cero bajo ninguna circunstancia”, declaró, según la agencia estatal Mehr. Si bien reiteró la disposición de Irán al diálogo, también advirtió que continuarán las represalias militares contra Israel.

En paralelo, el Departamento de Estado estadounidense comenzó a evacuar a ciudadanos norteamericanos de Israel. El embajador Mike Huckabee comunicó en redes sociales que quienes se encuentren en Israel o Cisjordania fueron convocados a completar un formulario para solicitar su evacuación, y que las salidas podrían realizarse en cruceros, vuelos comerciales, vuelos chárter o aeronaves del gobierno estadounidense.